El informe PISA es de risa

El informe PISA es de risa

La semana pasada, como cada tres años, se publicaron los resultados del famoso «informe PISA» ocupando numerosos titulares en los medios de comunicación. Un estudio, que en esta última edición, se llevó a cabo en 72 países y que evaluó a un total de 540.000 estudiantes.

Con esta sugerente rima he decidido titular esta entrada no especialmente por dudar de la rigurosidad de este informe, más bien por su interpretación y por el uso y abuso de sus resultados. Aunque este año en España hemos salido mejor parados y nos situamos en la media de la OCDE, la aparente desigualdad entre comunidades autónomas resulta preocupante. Pero, sin duda, lo mejor las interpretaciones:

Según tuits como estos, diré que soy español para que me tomes en serio. Aunque seguro que descubres que soy andaluz porque este post lleva una semana de retraso. 😉 (Hago chiste de ello para seguir avivando estereotipos, ya sabes, como aquí somos tan graciosos).

Pues sí, me parece de risa que se dé tanto bombo a los resultados de este informe por algunas de estas razones:

¿Qué es la OCDE?

Para aquel que esté despistado, aclararé que esta organización con tanto nombre y con otorgada legitimidad educativa se trata de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. ¡Ojo! que la «E» no es de «Educación», por si no te habías percatado. Sin embargo es la certificadora oficial de estos «Óscar educativos» y nadie duda de sus resultados, ¿verdad? Quizás sea porque estos 35 países fundadores ocupan el 70% del mercado mundial y representan el 80 % del PNB mundial. Razón de peso para legitimar cualquier estudio promovido por este «Club de los países rícos», como también se conoce a la OCDE.

A lo mejor también podríamos prestar atención a otros estudios de otras organizaciones de carácter educativo como la UNESCO, pero claro, estas se preocupan más de los países «pobres».

¿Quién la tiene más larga?

Al final de todo lo que nos llega es precisamente esto: unos resultados en forma de ranking que solo sirven, bajo mi punto vista, para generalizar y emitir juicios sesgados que confunden y atacan al verdadero objetivo de mejora educativa por el que en teoría se llevan a cabo estas iniciativas. Eso sí, resultan perfectos para titulares ingeniosos, hirientes o difamatorios como los que recoge nuestro compañero Jordi en «Los mejores tuits sobre PISA 2015».

Fuente: Resultados del informe PISA. El País

Fuente: Resultados del informe PISA. El País

No te pierdas tampoco su post «Comparando pepinos», en el que trata perfectamente el peligro y la sinrazón de las comparaciones cuando finalmente sirven para generar conclusiones inexactas o manipuladas.

¿De verdad sirve para evaluar la calidad de la educación?

Evidentemente NO. Pues claro que no. Podrá medir algunas competencias concretas de una manera más o menos eficaz, pero en ningún caso hablemos de EDUCACIÓN cuando ni siquiera rozamos una minúscula parte de ella. La educación engloba a todas las facetas de la persona y caer en reduccionismos baratos resulta un grave error.

Precisamente ahora que vuelve a estar tan de moda la teoría de las inteligencias múltiples de Gardner, no puedo evitar acordarme del auge de la psicometría de la primera mitad del siglo pasado. Tras el florecimiento de la escala de inteligencia Binet se impulsaron numerosos estudios demográficos comparativos, que haciendo un uso sesgado del famoso coeficiente intelectual, recayeron en resultados que fueron interpretados con fines xenófobos y dieron pie a políticas discriminatorias.

Echa un vistazo a COEFICIENTE DE INTELIGENCIA Y EUGENISMO si quieres ampliar información.

¿Singapur a la «cabeza»?

Según los resultados de este prestigioso informe, Singapur se sitúa a la cabeza de este ranking en las tres competencias evaluadas. Esta nación emergente se sitúa entre las más prósperas del continente asiático, con uno de los PIB per cápita más altos del mundo. En cuanto a su sistema educativo, sabemos que emplean el inglés como lengua de enseñanza y que poseen una educación obligatoria hasta los 12 años (curiosamente en este país PISA mide a estudiantes fuera de este rango de enseñanza obligatoria, ya sabes, 15-16).

Antes de destacar en ámbitos económico y educativo, en los años 60 Singapur estaba a la cabeza de los países más violentos del mundo. Esta lacra se incrementó con el auge del terrorismo en la década del 2000, pero fue contrarrestada con rotundidad hace tan solo 12 años por las duras medidas sancionadoras que estableció su nuevo gobierno. Concretamente con la instauración de la pena de muerte (uno de los 58 países del mundo que aplican esta sanción)

Hace 12 años en las cárceles había más de 500.000 presos, pero seis meses después, sólo quedaban 50. Se adopto la pena de muerte y el trabajo forzado para los criminales confesos, narcotraficantes y violadores probados siendo los más repetitivos condenados a muerte. Pero el gobierno fue más lejos todavía, se decreto que toda figura pública corrupta (políticos, policías, militares, etc.) fueran condenado a muerte (eso sí, siempre y cuando se cuenten con pruebas solidas que los involucre).argumentopolitico.com

¿Se puede hablar de calidad de la educación en estos términos?

Concluyendo

Todos estamos de acuerdo, aunque algunos no se quieran dar cuenta, que nuestro sistema educativo necesita una solidez política, una mayor inversión, que se tome más en serio a los profesionales, que se ofrezcan más oportunidades a nuestros estudiantes y que se les ilusione con un futuro prometedor. No necesitamos informe PISA para compararnos con otros o para descubrir todas nuestras carencias, necesitamos unión, acción y pensar en educación.


Algunas fuentes consultadas:

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