La FPE está que arde

La FPE está que arde

Al final, nos convencerán. Todo lo anterior estaba mal: centros, docentes, entidades, modelo normativo; Todo sin excepción. Ya lo asumimos: el modelo es lo que no funciona, hay que cambiarlo radicalmente.

Y mientras tanto aprovecho para….

FP_ARDE

Hace un tiempo abordamos el impulso que se dio en 2007 a la FPE y que hizo desarrollar la Ley 5/2002 de las Cualificaciones Profesionales  casi en su totalidad. Estos son los post que explicaban un sistema que estaba funcionando:

A Raíz de todo esto, comenzaron los Certificados de Profesionalidad y su importancia y relevancia en todos los sentidos. Por primera vez una formación impartida por entidades privadas y fuera del ámbito educativo, era reconocida por los entes públicos y además, podía reconocerse como competencia adquirida en el ámbito educativo (a nivel de Formación Profesional, Grado Medio y Superior) Aquí tenéis el resumen de todo lo acontecido en 2013 de cara a los certificados:

A nivel Estatal…

En 2013 el gobierno inicia una reforma sustancial del Sistema de FPE  provocado en parte por los escándalos de fraude y corrupción en los cursos de formación, y por otra motivados por crear un modelo donde sindicatos y patronales no sean juez y parte en el sistema.

Anuncia la implantación de  esta reforma como progresiva  que culminará en 2015 con una renovación integral. Mientras tanto, a través de las reformas laborales, o de las distintas convocatorias estatales de planes para trabajadores y jóvenes menores de 30 años, ha ido probando las distintas medidas que propone implementar. Una de ellas y, muy significativa ha sido la posibilidad de impartir Certificados de Profesionalidad al “margen del sistema” y con coste para el alumno. Aquí nos hacíamos eco en Ojú:

Las últimas convocatorias han sido tan estrictas y con tantos requisitos que, aunque eran concurrencia competitiva, concurrir a ella ya era de por sí un logro. En este sentido han provocado que los pequeños centros de formación, entidades con poca representatividad se queden al margen de muchas opciones. Detrás de todo, parece que hay una lucha de gigantes que se están rifando el nuevo pastel de la formación:

Mientras tanto en Andalucía….

En el caso de Andalucía, la gestión de la formación de trabajadores (ocupados y desempleados) pasó a manos de Educación una decisión poco acertada y que viene motivada también por las mismas razones que el estatal: caso ERE y el SAE. Esto provoca un parón en la formación de dos años sin convocatorias y prácticamente sin políticas activas de empleo.

Sin menoscabar la buena intención de Educación, todos creíamos que esto no iba a ser buena idea. Ellos tienen su sistema y es tan distinto al de trabajadores que hacer que uno funcione como el otro y viceversa, no tiene sentido. Y efectivamente, el pasado 26  de agosto , motivado por el caso de un sindicato y de un exconsejero de hacienda con el tema de los cursos, el Consejero de Educación anuncia una nueva Ley de integración entre la FP inicial y la FPE (pero si ya teníamos la Ley de las Cualificaciones y la integración de los sistemas a través de la Estatal!) que viene a dar mucha más importancia a los centros públicos y concertados en esto de la formación de trabajadores. Un buen resumen de este anteproyecto de ley lo tenéis en la página de Luisa Sánchez Miranda(@formadoraocup), con un hilo de comentarios muy interesante.

A todo esto, parece que se están haciendo las cosas como siempre, a golpe de Leyes. Si algo no funciona, tiene un error, lo mejor es destrozarlo todo y montar algo nuevo sin consultar, ni sopesar qué ha funcionado. Pensar que fallan los equipos docentes, las metodologías, los centros que lo hacen bien, es un error.

Este aire nuevo que está  soplando va a llevarse a muchos profesionales y centros fuera. No se trata de reciclarse, o de estar en constante mejora, o incluso de una resistencia al cambio, es una cuestión de que se llevan el chiringuito a otra parte y los actores comienzan a ser otros.  Todos estos cambios han venido con promesas de mejora y eficiencia del sistema, pero como decían los Piratas…

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